lunes, 12 de junio de 2017

¿Cobrar las actuaciones en cervezas? Deslealtad a los artistas.

Dedicado a mis compañeros músicos.
Estoy muy cabreado con cierto anuncio de cervezas de cuyo nombre no quiero acordarme.
Habla sobre la historia de la banda de músicos "Los Desleales", que cobra actuaciones en cervezas, pasándose por el forro la profesión, el oficio, los años de estudio y sacrificios, las pequeñas y grandes fortunas invertidas en instrumentos, equipos, medios de transporte...
Ahora que en los eventos se nos exige la máxima profesionalidad por el mínimo precio; ahora que se nos persigue para que esos mínimos ingresos, a veces esporádicos debamos declararlos a Hacienda y cotizar la seguridad social de los músicos hasta el punto en que en muchas ocasiones los músicos no pueden actuar al no poder soportar un régimen fiscal y de Seguridad Social pensado para ingresos constantes y no esporádicos como suele suceder en la inmensa mayoría de las ocasiones; ahora que la crisis se ha llevado por delante las subvenciones a las fiestas y se han reducido los presupuestos para los artistas...
Ahora se sacan de la manga que unos músicos llamados "Los Desleales" -el nombre les viene que ni pintado-, se van a dedicar a cobrar en cervezas, que con eso les vale...
Imagino que esos "Desleales" no tienen familia que mantener, no tienen una hipoteca o un alquiler que pagar, no tienen facturas de gas, luz, agua, teléfono... Imagino que sus medios de transporte se los han regalado y además funcionan con energía solar, porque parece que no tienen que pagar combustible, porque parece que son hijos de papá que les han regalado las clases de música, los instrumentos, los estudios de grabación, las promociones...
El anuncio es un repugnante insulto a los músicos, que constantemente vemos despreciado nuestro trabajo, nuestro oficio, al que dedicamos vidas enteras; ya nos encontramos en infinidad de ocasiones en las que nuestras ganancias dependerán de la caja que se haya hecho (o de la que "dice el dueño" que se ha hecho"), y nos encontramos en locales sin promoción, sin clientela fija, que depende directamente de los "amigos" y seguidores que podamos arrastrar (para un par o tres de veces tal vez funcione, pero nuestros hijos comen todos los días), y nos encontramos que los dueños nos "completan" el caché con tickets de cerveza, y en algún caso me he encontrado que pretenden completarlo con "sustancias ilegales".
"Hay cosas más importantes que el dinero" dice el anuncio... Imagino que a los trabajadores de esa empresa cervecera les pagan también en botellines porque "ese botellín tan pequeño tiene uno de los sabores más grandes del mundo". Y que los ingresos obtenidos por el consumo de esa cerveza será donado íntegramente a labores sociales y que ni un solo directivo verá un euro de ahora en adelante. Pueden cobrárselo en cervezas. Todos los músicos hemos trabajado alguna vez "por las cervezas", en nuestros años mozos, cuando nuestra ilusión por presentar nuestros progresos era superior al sentido común y al respeto por los músicos de profesión. Ahora seguimos trabajando a veces por la cara, ya sea en actuaciones benéficas o en festivales que nos sirven de promoción. De ahí, a firmar un "acuerdo" de tocar cada año en las fiestas a cambio de botellines porque "hay cosas más importantes que el dinero" va un trecho muy amplio. Imagino que el alcalde ese también paga a sus funcionarios y a todos los servicios del ayuntamiento en especies, ya sea botellines, o con latas de berberechos, con pastillas de jabón o con espejitos como a los indios de norteamérica.
Cuando tenga que hacer reformas en casa, o tenga que arreglar la furgoneta, les diré que recuerden que "hay cosas más importantes que el dinero" (la manutención de su familia, no, desde luego, que probablemente, según el anuncio les ha de importar una mierda), y les daré una caja de botellines de cerveza.
Parafraseando a Luis Tosar anunciando otra cerveza... cada vez que me pongan un botellín de esos que tienen tanto sabor les diré:
- Llévate "eso" por favor.

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